30 de junio de 2010

El ermitaño vagabundo

Todos los días un hombre vaga por la vida
y desconfía de todo a su alrededor.
Mientras camina, observa la hipocresía
de aquel que cambia afecto por compasión.

Este hombre cree que la fortuna es un delirio,
capricho vago que pasa sin saludar.
No se presenta cuando se invoca su auxilio,
se hace evidente cuando ya se va a acabar.

Él ha dejado en el olvido las pasiones.
Sin emociones, prefiere no dialogar
Se aleja siempre de personas e impresiones,
pues nada nuevo parecen encomendar.

Tarde en la vida descubrió grandes ventajas
en despedirse de almas sin parecer
tener en claro sus funciones en la vida
y se conforman tan sólo en obedecer

Se dedicó a dejar a un lado a los amigos.
Con la ilusión de trascender se obsesionó.
Se auto-exilió del mundo sin dejar testigos,
y en una nota sin final un grito ahogó

La historia lo borró.
Su cordura desapareció,
y su mente cada vez más se alejaba
de ese cuerpo en el cual no encajaba.

Se le olvidaron las palabras,
pero aprendió a escuchar pasiones.
Tradujo sus sensaciones
en pinceladas abstractas.

Su sentir viajó más pronto que su entorno,
dejó atrás muros basados en falsedad.
Vió con euforia que hay más identidades
que sólo aquellas que dicta la sociedad.

Una mañana, mientras transformaba un lienzo,
sus ojos viejos temblaron y se cerraron,
y una vez más, sin obedecer al tiempo
dictó las reglas de su propia culminación.

15 de junio de 2010

Tan sólo un momento


En algún lugar se encuentra un sujeto que ha encerrado su mundo, lo ha dejado tan inmerso en su maraña de pensamientos y personalidades, que le cuesta enorme esfuerzo tratar de tocar siquiera una parte de su propia naturaleza. De vez en cuando, en las contadas ocasiones en que logra colar alguna mísera cantidad de consciencia entre todo el caos tejido por sus prejuicios y miedos, siente la necesidad de conquistar la autenticidad, mostrarse tal como es, dejando de lado esas máscaras que, por temor al rechazo y la pérdida eterna de afecto, ha ido confeccionando a lo largo de su existencia.

Se obsesiona con crear formas no tan obvias de mostrar su verdadera personalidad, aquella que no necesariamente conecta con su cuerpo y su forma de actuar ante otros seres igual de falsos, pero auto-condescendientes. Busca la manera de dejar una constancia, al mismo tiempo evidente y discreta, de quien en realidad es, para limpiar su consciencia, siempre dejando lugar para la interpretación de terceros.

Tapa el rostro de su verdadero ser con velos que le auguran una estancia relativamente tranquila entre sus "semejantes", aunque en su mundo él sabe que es diferente y que está muy por encima de quienes lo rodean.
En su afán por conquistar la trascendencia con la personalidad que realmente tiene, es incapaz de decidir entre varios caminos que tiene al frente. No porque ninguno le agrade, sino porque todos le maravillan. ¿Por qué no ha tomado alguno? Porque tiene miedo a fracasar, y prefiere consolarse pensando que aún queda tiempo para encontrar la motivación necesaria.

Necesita, por tan sólo un momento, alcanzar su verdadero mundo para seguir su genuina intuición inclinada y pararse triunfal sobre lo que todos llaman vida.

11 de junio de 2010

Ahhhh!!!!!!!!!!!

En este momento siento desesperación, impotencia, ira y una mezcla de sentimientos y emociones, la cual es muy difícil controlar; pero he sido yo el único responsable de llegar hasta esta instancia, debido a mi torpeza, insistencia y terquedad en alimentar ilusiones falsas apoyadas sobre cimientos prácticamente inexistentes.

¿He tratado de cambiar? Sí. ¿Lo he logrado? Parece que no.

Sigo sin entender porqué los demás consiguen en tan poco tiempo lo que a mí me lleva años alcanzar. ¿De dónde se origina tanta confianza?

Basta de hacer preguntas, ¡necesito las respuestas ahora! Lo malo es que la única persona que me las puede dar, es, precísamente, la única persona a quien no me atrevo a cuestionar.

9 de junio de 2010

Un Instante (fragmento)

El destino
ha trazado este camino
que recorro sin dejar
ningún lugar para el azar.

Y cada día
de esta vida tan vacía y superficial que no me dice nada
es lo mismo que el ayer
sin poder dejar a un lado eso que no quiero ver.

Pues el miedo a no perder
se apodera de mi ser
y me orilla a sentarme
y esperar un nuevo amanecer.

Los minutos se me escapan de las manos,
mil proyectos incumplidos
engalanan el trayecto de mis años


3 de junio de 2010

¿Puede ser?


Encontré esta foto por casualidad y cuando la vi me dio miedo, porque refleja exactamente como me siento en esta etapa de mi vida.

No intento buscar metáforas ni significados ocultos, simplemente me identifiqué y eso fue todo.