Dedicado a mi amigo Alejandro Marmolejo, quien me dio la idea de escribirlo.
Siendo el español una de las 68 lenguas oficiales de México (esto es en serio) y dado que lo hablamos en nuestro día a día, tendemos a minimizar la complejidad del idioma frente a, por ejemplo, el Alemán o el Inglés (y es que bueno, como mexicanos tendemos a minimizar todo lo nuestro frente a cualquier cosa extranjera, pero ese es tema aparte) siendo que no hay razón por la que debamos hacerlo.
Dicen las malas lenguas (chiste fácil) que es más sencillo para un hispanohablante aprender el Inglés, que para un angloparlante aprender el Español, y ello se debe, entre otros factores, a la compleja conjugación de los verbos para cada pronombre y para cada tiempo verbal, y a los múltiples sinónimos que definen a un mismo sustantivo. Y de eso quiero que trate este post. Centrándonos en nuestro país, haré cuenta de los conceptos que tienen la mayor cantidad de palabras para designarlos.
Cerdo.- Refiriéndome al animal y no a lo que le gritan las mujeres a los hombres pervertidos. Podemos encontrar que además de cerdo se le dice cochino, puerco, marrano y, en algunas provincias le llaman cuchi o cuchí.
Burro.- También hablamos del animal, no de esos alumnos a quienes no les gusta estudiar. Es además llamado asno, jumento o borrico, todas las acepciones aceptadas por la RAE.
Automóvil.- Se le dice también carro, coche, auto, carcacha (éste último quizás de manera un tanto despectiva).
Amigo.- O cuate, camarada, carnal...
Estoy consciente de que muchos de estos son regionalismos o lenguaje coloquial, pero la mayor parte de ellos son comunes en casi cualquier parte del país. No es de extrañarse que a los extranjeros les salgan canas verdes al tratar de aprender nuestro vilipendiado idioma. ¿Conoces otra palabra con estas características? Siéntete libre de ampliar la discusión en los comentarios.